31 de Agosto y allí estuvo Blas de Lezo para la Conmemoración del Asalto a San Sebastián como todos estos años.
Este año, además de nuestras aportaciones como Royal Artillery y rifles del 5th/60th, hemos querido recuperar nuestra unidad de línea de los Royal Scotts, el 1st on Foot, unidad que estuvo presente en el asalto a la ciudad y que perdió más de la mitad de sus hombres asaltando las murallas.
Así, este año, hemos ido de azul, rojo y verde en la columna aliada.
Empezamos pronto el asalto de 31 de Agosto, con la dotación de la artillería y los rifles como escolta yendo hasta el espigón del Kursaal. El cielo estaba azul salpicado por nubes, y una ligera brisa nos llegaba desde el mar, haciendo que nuestros uniformes de lana no nos diesen demasiado calor.
Desde allí comenzamos un breve pero intenso cañoneo contra las posiciones francesas ubicadas en el monte Urgull. Mientras la columna aliada marchaba para ocupar sus posiciones en el espigón, de donde saldríamos todos hacia la plaza Zuloaga a reconocimiento que las sociedades realizarían este año al Banco de Alimentos de Gipuzkoa por su gran labor.
Y mientras nos dirigíamos allí en columna, el cielo se tornaba cada vez más gris. En la plaza de Zuloaga tras el reconocimiento al Banco de Alimentos y un sonoro cañonazo, partimos hacia el Boulevard, entre gaitas y tambores que nos ayudaban a llevar un buen paso. Nuestros sargentos se encargaron de ello.
Cuando llegamos a nuestras posiciones, el cielo tenía un tono bastante gris. Todos nos temíamos que tal y como las predicciones habían augurado, pronto llovería. Y así fue, la lluvia comenzó a caer. Cubrimos lo mejor que pudimos las bocas de los cañones y las llaves y esperamos a que el resto de la comitiva y la columna francesa llegaba. Y aunque en nuestro interior todos esperábamos que la lluvia no fuese a más, el cielo nos decía otra cosa. Y por fin llegó. Llegó la comitiva, llego la columna francesa, llegaron las y los dantzaris. Y llego la lluvia, pero esta vez en serio. y con ella el viento, los rayos y truenos.
Cinco minutos más tarde, de la abarrotada plaza del boulevard, solo quedaban las sociedades y la banda de música, interpretando la Marcha de San Sebastián y las columnas francesas y Aliadas, bajo la torrencial lluvia. Las autoridades, refugiadas en el kiosko, dieron por finalizado el acto cuando nuestros artilleros dispararon un cañonazo. Tras ello, nuestros mandos nos dieron la orden de replegarnos a Orixe. El evento del 31 de Agosto se había cancelado.
Se decidió ir en columna hasta allí, lo cual nos granjeo el apoyo del público, a resguardo en los soportales, y también alguna broma. Y así cantando alguna tonada, como Over the hills and far away, nos volvimos a cambiarnos de ropa y guardar las cosas.
Pero volveremos!